Las grandes acciones, las que valen la pena, no son algo sencillo de realizar. Sin embargo, cuando son necesarias para conseguir un bien mayor, las cosas podrían cambiar de manera considerable.
Un hombre despierta, desorientado y sin poder recordar nada, ni siquiera su propio nombre. Por suerte, conserva su instinto, y este le indica que se encuentra a bordo de una nave espacial. Eso, y que hay dos cadáveres cerca de él, colocados de la misma manera que él cuando despertó.
Con el paso de las horas y en medio de intentos por comprender lo que sucede, recuerda que se llama Ryland Grace, un científico-maestro que por alguna razón ahora está involucrado en una misión espacial nunca antes realizada. Blog
Lectores Nocturnos.
Los recuerdos lo embargan, desbloqueándose en su mente, y revelando la historia de cómo terminó ahí, y cuál es la importante misión que debe llevar a cabo.
En esta novela las cosas al principio parecen suceder con bastante calma, aunque no por eso resulta aburrida. El descubrimiento de su pasado que realiza el protagonista es una manera muy dinámica de introducir al lector en la trama.
Leí a Andy Weir por primera vez en El marciano, historia que me cautivó y sigo creyendo que nunca voy a olvidar. La manera de contar las cosas que tiene este autor, basado en leyes y teorías científicas, es por demás interesante. Y si creí que Mark Watney era un protagonista increíble, Ryland Grace lo iguala, y a momentos lo supera, en sus propias situaciones. Creo que los dos podrían llegar a ser muy buenos amigos.
Los motivos de la misión que Ryland (o Grace, porque en el espacio todos se llaman por sus apellidos), son increíbles. La novela se presenta como una sucesión de detalles cautivadores. Las acciones de nuestro protagonista son más importantes de lo que creíamos, pues no acontecen solo para que el personaje logre mantenerse con vida, sino que también representan una enorme y única esperanza para la salvación de la humanidad. Blog
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Me gusta mucho el tipo de narración que emplea el autor. Me he encontrado con ella en algunas ocasiones y en cada una he descubierto que logra dar dinamismo a la historia. La línea narrativa se divide en dos (del pasado al presente y del presente al futuro, y ambas partes avanzan al mismo tiempo) para al final contar toda la historia.
Aunque es verdad que no entiendo muchos de los conceptos científicos que presenta durante su desarrollo -seguramente alguien con un buen conocimiento en ciencias lo pasará bomba-, eso no me impidió disfrutar las acciones, e incluso aprender algún significado de la física que antes no comprendía en absoluto.
Esta es una novela sobre la Tierra, sobre el espacio, y también sobre la posibilidad del futuro. Sus detalles tienen sentido e impulsan cada uno de los momentos, grandes y pequeños, que completan los capítulos. Eso me parece algo curioso porque además del sentimiento positivo final que me entregó este libro, sucede que puedo recordar con mucha claridad el orden de casi toda la trama. Eso es algo peculiar con una historia (al menos para mí), porque normalmente muchos detalles que no tienen tanta relevancia o no están contados en un ritmo que me cautive, simplemente se pierden en mi memoria. Blog
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De momento creo que no tengo mejor cumplido para este título en especial que ese.
Comparado con El marciano, Proyecto Hail Mary de alguna manera nos hace sentir menos soledad, o al menos ese concepto no parece casi otro personaje más. Las razones que el protagonista tiene para hacer lo que hace se revelan para él casi al mismo tiempo que para nosotros, logrando así la realización emocional del significado que eso implica.
Básicamente debo decir que en esta historia todo son sorpresas. Tanto en lo sucedido antes de despertar como en lo que ocurre después, pero si esto fuera una competencia, lo que viene después gana la contienda por su contenido entrañable (y sin duda alucinante).
Con un final digno de los mejores sentimientos, esta novela entrega una aventura adictiva, difícil de creer, pero no por eso menos visual y de brillante acceso para las imaginaciones más renuentes. Con descripciones que despiertan la curiosidad, humor y un propósito del bien mayor, Ryland Grace (y los increíbles personajes que en algún momento lo acompañan) nos adentran en los misterios del espacio y la distancia, pero también de la valentía. Blog
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Y es que, sin duda, la mejor entrega es aquella que se realiza con la seguridad del objetivo. Aun cuando lo desconocido acecha donde menos se le espera.
La frase:
“Entonces ¿por qué soy yo el que está aquí? Todo lo que hice fue demostrar que la creencia de toda mi vida era equivocada.
Supongo que recordaré esa parte después. Por ahora, quiero saber qué estrella es esta. Y por qué construimos una nave para traer gente aquí.”
Esta lectura sucedió:
En tres días y dos noches. Con mucho silencio y poco que hacer. Formato: Kindle.
Proyecto Hail Mary, Andy Weir. 384 p. Nova, 2021
Trad. Javier Guerrero Gimeno
¡Hasta la próxima!