Regresa la Draki, y todavía tiene al fuego de su lado, pero ahora su aventura nos centra en la comunidad de la que escapó anteriormente y a la que por caprichos del destino se ha visto obligada a volver.
El destino, propiamente dicho, juega el papel principal en esta historia. Aunque muchos no crean en él, lo que le pasa a Jacinda no puede llamarse de otra forma.
Su historia de amor se ha visto opacada por un repentino incidente que le explotó en las manos y cuyos daños y consecuencias no sabe cómo solucionar (y nadie podría, la verdad).
Es por eso que lo que necesita ahora es mente. Pensar con seriedad sobre sus cosas, y es lamentable que su sensible y necesitado corazón la hagan estar enferma de amor y de aparente tristeza, y por lo tanto se equivoque tanto, hasta distorsionar momentos cumbre en los que, como está pasando mucho, los ojos del protagonista –y su mente- nos dejan confundidos ante lo que pasa. Hay ahí algún problema tremendamente recurrente.
Toda la atención brindada a la increíble Draki de fuego cambia repentinamente y ahora todos parecen ver a Jacinda como una habitante cualquiera, tal vez lo que siempre quiso ser pero ahora eso no hace más que deprimirla mientras intenta salir adelante.
Les contaba que en esta segunda parte de la historia, lo que le pase a los personajes se lo tienen merecido, cada uno de ellos, a cada momento. Todos saben muy bien lo que puede pasarles si no hacen caso a su sentido común pero aún así se dejan llevar por sus sentimientos o curiosidad. Entre ellos, para nuestra pareja protagonista, el desmedido amor (difícil de creer) que los hace sentir muy especialmente que serán el uno para el otro por siempre y para siempre jamás. Reacción que no me parecería extraña, como es tocada, en personajes más adultos y experimentados.
Vanish cumple su promesa de hacernos continuar con escenas increíbles y originales, aunque algunas muy a su manera. Nos arrastra de nuevo a donde comenzamos. Un lugar que no está hecho para los libres de corazón.
Pero lo que presagia esta segunda parte, es algo que por el momento resulta una gran promesa. Una aventura todavía mejor que ésta y de la que se espera cada vez más.
Hablándonos de castigos crueles y paciencia para comportamientos de hace varios siglos que resultan desesperantes, nuestra confundidísima Jacinda se encarga de darnos buenas sorpresillas y, la muy pilla, salir bien parada de aquellas desgracias que están A PUNTO de ocurrirle.
Quién fuera ella para superar de esa forma los problemas (que son un montón).
Parte de la historia que básicamente no convence como lo hizo la primera, que se queda con el peligro de olvidarse fácilmente pero de recordarse de igual forma debido a lo poco verdaderamente relevante de lo que se habla e impresiona genuinamente.
Que alguien pare la mala suerte de esta Draki, que ya estoy temiendo un montón de cosas.
Y si de amores y vuelos se trata, si es eso exactamente lo que podría interesarles, no pueden dejar de lado esta historia. Básicamente original, la verdad.
El halago que le di al protagonista masculino en mi mente, por ser tan centrado y racional, ahora sencillamente no me dejó moverme hacia ningún lado respecto a mi opinión, pero el tercero en discordia vaya que toma buena parte del partido, también con buena mente.
Curioso esto de las historias que hacen brillar -en muchos momentos- más a los personajes secundarios que a sus protagonistas. Lo dejan a uno pensando.El titulo tiene todo que ver, pero la verdad es que veremos muy poco. Este corazón idéntico y roto puede hacer mucho más, de eso estoy seguro.Lo que definitivamente no falta con Vanish es, definitivamente, relajadas noches de lectura previas a tranquilizantes sueños.
La frase:
Mis alas agitaron el aire y me llevaron cada vez más alto. Era como si estuviera alejándome del pueblo a toda velocidad, esforzándome por llegar lo más lejos posible. Cerré los ojos y saboreé el viento fuerte que azotaba mi rostro.
Por un instante llegué a pensar en seguir de largo y desvanecerme, esfumarme en el cielo. No volver a descender jamás.
Vanish: Chica de niebla, Sophie Jordan. 263 p. V&R Editoras, 2012
¡Hasta la próxima!
3 comentarios:
No he empezado la saga aún, pero pinta bien ;)
Gracias por la reseña ^^
besitos<3
Aún no me he puesto con esta saga,la tengo en mi montaña de pendientes.
Pero le tengo muchas ganas, me apetece mucho la trama y he leído buenas reseñas,sobre todo del primero.
Soy nueva por aquí y te sigo desde ya,me gusta tu blog y quedas invitado al mío.
Un besito desde el rincón de la lectura.:)
Sabéis cuándo va a salir vanish el segundo?
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